En el marco del Plan de Gestión de la Catedral de Santiago, impulsado por el Consorcio en colaboración con la Fundación Catedral, acaban de finalizar una serie de actuaciones en el Pazo de Xelmírez, integrado en el conjunto catedralicio. Esta primera fase de las obras, financiadas por el Consorcio con un presupuesto global de 272.300 euros, está destinada a recuperar diversos espacios de este edificio histórico y abrirlos al público.

La Oficina Técnica del Consorcio se encargó de la realización del proyecto y de la dirección de las obras. Desde la misma destacan que “el Pazo de Xelmírez, que tiene su origen en el siglo XII, es el gran desconocido y, al mismo tiempo, una pieza clave en el conjunto catedralicio, con salas de gran valor histórico y muchas posibilidades de uso y gestión al servicio de la Catedral”.

La nueva sala de exposiciones se inaugurará con la muestra del 800 aniversario de la peregrinación de San Francisco de Asís a Santiago de Compostela

La Sala de Armas y las dependencias anexas se han acondicionado como salas de exposiciones. Estos espacios albergarán inicialmente la muestra del 800 aniversario de la peregrinación de San Francisco de Asís a Santiago de Compostela, impulsada por la Axencia de Turismo de Galicia y la Sociedade de Xestión del Plan Xacobeo. Esta exposición contará con piezas que requieren unas condiciones ambientales muy exigentes para su correcta conservación, lo que obligó a ejecutar determinadas obras no previstas en el proyecto inicial, en particular la instalación de un suelo radiante.

El pavimento existente en la Sala de Armas es fruto de una intervención realizada en 1955 por el arquitecto Francisco Pons Sorolla. A simple vista ya se apreciaban problemas de filtraciones de agua sobre el mismo. En principio los arquitectos del Consorcio propusieron levantar el pavimento para buscar una nueva solución constructiva que evitase la entrada de humedades. Pero, al retirar las piedras, se comprobó que bajo las mismas no existía la solera de hormigón que recogía el proyecto de Pons Sorolla, sino que las losas estaban asentadas sobre una cama de tierra. Esto hizo posible el reaprovechamiento de las piedras retiradas de la Sala de Armas para ejecutar en otras estancias del edificio suelos de calidad.

El problema de las humedades

Las losas de la Sala de Armas también se aprovecharon para mejorar el suelo del patio exterior, puesto que, una vez iniciada la obra, se verificó que la red de saneamiento existente era insuficiente para la correcta evacuación del agua de la lluvia. Así, se propuso la ejecución de una nueva red y de un canal de drenaje. Y para evitar el ascenso del agua por capilaridad se puso un nuevo pavimento, que se colocó sobre una lámina impermeable.

Además, como el principal objetivo de la intervención era sanear y evitar las humedades que afectan a la Sala de Armas, también se reparó y mejoró el sistema de canalones y bajantes tanto en el patio exterior como en el superior.

Instalación de un ascensor y mejoras en las escaleras

Por otro lado, se instaló un ascensor en el hueco de la escalera del torreón medieval. De esta manera queda comunicada la planta del Salón de Armas, la entreplanta en la que se encuentran los aseos y el piso del Salón Real. Y, para completar la mejora de la accesibilidad, se ensancharon varios tramos de la escalera, lo que permite una buena circulación entre las diferentes plantas con uso expositivo. También se realizaron actuaciones de acceso a los asientos de piedra sobre la Plaza del Obradoiro, que hasta el momento eran inaccesibles.

Entre otras intervenciones que se han llevado a cabo en el Pazo de Xelmírez, destaca el saneamiento de las revocaduras de las bóvedas de la Sala de Armas y del túnel de acceso desde la Plaza del Obradoiro. Además, se demolió la recepción que se había instalado con carácter provisional para regular la entrada de visitantes a una exposición temporal en el palacio.

Continuación de las obras

La Axencia de Turismo de Galicia continuará en los próximos meses apoyando el proceso de recuperación del Pazo de Xelmírez, a través de la promoción de una segunda fase de actuaciones. El objetivo es la apertura, esta primavera, de la exposición conmemorativa del 800 aniversario de la peregrinación de San Francisco de Asís a Santiago de Compostela.

El Consorcio de Santiago, a través de su Oficina Técnica, seguirá prestando asistencia técnica especializada y dirigiendo las obras que se realicen en el palacio, hasta su completa recuperación y apertura al público.